Fainá de jamón y queso con masa licuada
Si estás buscando una receta fácil, rápida y deliciosa para sorprender a tu familia o amigos, el fainá de jamón y queso con masa licuada es la opción ideal. Esta versión simplificada te permite prepararlo sin complicaciones, utilizando la licuadora para obtener una masa perfecta en minutos. La clave del éxito reside en la calidad de los ingredientes: un buen jamón y un queso con mucho sabor harán toda la diferencia.
Ingredientes que vas a necesitar:
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Huevos: 6 unidades
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Harina: 1 ½ taza
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Leche: 2 tazas
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Polvo de hornear: 1 cucharadita
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Aceite: ½ taza
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Jamón: 300 gramos
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Muzzarella: 300 gramos
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Queso rallado: Un puñado (para espolvorear)
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Pan rallado: Cantidad necesaria (para el molde)
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Sal: Una pizca
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Pimienta: A gusto
Preparación paso a paso:
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Prepara la masa en la licuadora: En el vaso de la licuadora, combiná 3 de los huevos, la harina (previamente tamizada junto con el polvo de hornear), la leche, el aceite, la pizca de sal y la pimienta. Licuá hasta obtener una masa homogénea y sin grumos, con una consistencia bastante líquida.
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Prepara el molde: Aceitá una fuente para horno y espolvoreala generosamente con pan rallado, asegurándote de cubrir toda la base. Esto evitará que la fainá se pegue y le dará una textura deliciosa.
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Cocina los huevos duros: Cociná los 3 huevos restantes hasta que estén bien duros. Una vez fríos, pelalos y cortalos en rodajas. Reservalos.
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Arma tu fainá: Volcá la mitad de la masa líquida en el molde preparado. Luego, distribuí una capa de jamón, seguida de una capa de muzzarella y, por último, las rodajas de huevos duros. Continuá con este orden hasta terminar con los ingredientes, dejando suficiente espacio para la masa restante.
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Cubre y hornea: Cubrí toda la preparación con el resto de la masa. Espolvoreá generosamente con queso rallado para un gratinado irresistible. Llevá la fainá a un horno precalentado y caliente durante aproximadamente 35 minutos, o hasta que esté dorada y firme.
¡Listo! Ya podés disfrutar de una deliciosa fainá de jamón y queso casera, perfecta para una picada, un almuerzo o una cena informal. Animate a probar esta receta y descubrí lo fácil que es incorporar este clásico a tu repertorio culinario.
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