La actividad económica retomó el sendero positivo en agosto
El efecto rebote tras el año de la sequía y el impulso del consumo local influyeron positivamente en el Índice Líder de Ceres.
La actividad económica creció un 0,1% en agosto, de acuerdo a los datos del Índice Líder de Ceres (ILC), luego de mantenerse estable en julio y poner fin a una racha de nueve meses consecutivos al alza.
El ILC, que elabora el Centro de Estudios de la Realidad Económica y Social (Ceres) y suele ser un indicador adelantado del nivel de actividad, destacó la importancia del efecto rebote tras un año marcado por la sequía y el impulso del consumo local.
Desde Ceres precisaron que, a pesar del regreso a tasas positivas, es necesario esperar a las próximas mediciones para comprobar si hay nuevamente una tendencia alcista.
El Índice de Difusión (ID), que muestra la proporción de los componentes que crecieron en el mes, fue del 55% el mes pasado, lo que equivale a decir que más de la mitad de las variables crecieron.
El rebote tras la sequía y el desvío de consumo por la diferencia cambiaria con Argentina
El ILC recogió un incremento en aquellos sectores afectados en 2023 por los efectos de una sequía histórica y el abaratamiento relativo de Argentina por la diferencia cambiaria que motivó compras en el país vecino.
En contrapartida, el rebote tras un año malo y el aumento en las exportaciones de celulosa, que pasó de 135 a 294 millones de dólares, impulsaron el indicador al alza, así como el aumento sostenido de la masa salarial, por un mayor número de empleados y una suba del salario real, que le dio impulso al consumo local.
En ese sentido, los autores indicaron que, pese a la recuperación de las exportaciones, con una mejora del 27% interanual en agosto, el agro “enfrenta precios internacionales mediocres en función de los costos de producción”, mientras lo que los márgenes de ganancia en la actividad agropecuaria tampoco se ven favorecidos por el valor del dólar, ya que el tipo de cambio real se encuentra en niveles históricamente bajos.
“A nivel general, la actividad encuentra poco dinamismo y vías para lograr un crecimiento sostenido, más allá de rebotes puntuales”, observaron desde Ceres, al mencionar la caída de la producción industrial y de la construcción.
Finalmente, apuntaron: “Esto, sumado a imprevistos como las lluvias excesivas que complicaron la actividad agropecuaria, se manifestó en el ILC de julio con su primera tasa no positiva del año y un enlentecimiento del ritmo de crecimiento que traía el índice”.
Fuente: Ámbito Uy
¿Cuál es tu reacción?